02 marzo 2010

VIAJE A ISLA SUR (1ER ACTO)


PRIMER ACTO

Comienza otro viaje más, este va a ser una especie como de viaje incompleto, me explico, nos dirigimos a la Isla Sur, la mejor parte sin duda alguna de Nueva Zelanda. En el coche, una caja de cerillas, vamos Isa, Mónica y yo. De nuevo repetimos el viaje que hicimos anteriormente. Nos cruzaríamos toda la Isla Norte buscando Wellington, la ciudad fronteriza en cuestión paso insalvable y fronterizo. Antes de llegar al Lago Taupo hicimos unas cuantas de paradas algunas más obligatorias que otras, eso sí, con una foto como denominador común en todas ellas. Antes de llegar al Lago Taupo, en el mirador que comenté en el viaje con Andreas e Isa, nos paramos para que Mónica hiciera sus fotos, nosotros ya teníamos de antes, hombre.....!!!!






Los paisajes se van alternando como si una pastilla efervescente fuera, comenzaron verdes, entre pinos, helechos y praderas en donde no había lugar para un parche marrón de tierra hasta consumirse todo ese color y dejar paso a zonas desérticas y áridas.



Exáctamente son los alredores del Parque Nacional de Tongariro, otro viaje que vendrá también más adelante, bueno no quiero adelantar acontecimientos.
Parada obligatoria para fotografiar este fantástico momento en el que las tres montañas parecen anexionadas(Monte Tongariro, Monte Ngauruhoe, Monte Ruhapehu), y que luego cuando las transcurres te das cuenta de que no lo están y aún con un poco de nieve las 3 (tengo que aclarar que este viaje se hizo hace casi dos meses, actualmente solo hay nieve en la copa de la más grande de todas, el Monte Ruhapehu con 2797 mtrs). Sitio donde se rodó El Señor de los anillos (EL REINO DE MORDOR). También otra estirada buena de piernas, aprovechábamos cada momento para ello, son 10 horas en coche las que hicimos el primer dia hasta llegar a Wellington.




700 Kms de coche y un viento que casi se me lleva la puerta el coche cuando la abrí. Nadie en la calle, aunque la impresión general como ciudad fue muy buena, nada que ver con Auckland. Wellington, capital neozelandesa, mucho menos transitada y poblada que Auckland, 400 000 hbts, orientada hacia el mar, con casas que se extienden incluso por las montañas y con un tranvía que escala la falda de la ciudad. Soltamos la maleta, un par de cervezas jugando una partida de billar y al catre. AUCKLAND-WELLINGTON , estábamos a un paso de poner pie en suelo Sur...





Al levantarnos y mirar por la mañana, todo nublado y lluvioso y el viento persistía. Café en la misma habitación, a falta de mate, y dejamos la habitación buscando comprar los billetes y hacer un par de cosas entre ellas visitar la Embajada Española.















Compramos los billetes para los 3 y el coche, 404NZ$, que vienen a ser como la mitad en €.
Perdimos el barco que salía a las 12 hacía Picton (Isla Sur) y decidimos desayunar mientras esperábamos el siguiente. Aquí un nene bastante peculiar, de padre Nigeriano, madre Japonesa y abuelo neozelandes....aquí todo es posible...








También nos conectamos a internet sin saber cuando lo volveríamos a hacer. Lugar regentado por una par de chinos. Parecía como un sitio, clandestino en el que acababa de pasar un ciclón, fruto de esto, una foto de una visión reducidad del cuarto de baño.























Esperando impacientes montarnos en el barco y poner pies en un lugar completamente diferente.










































Visión de las islas circundantes que nos acompañaban en la travesía a Picton.



















Llegamos a las 17.30 a Picton y sin bajarnos del coche vimos el camino "correcto" en la guía y tiramos hacía delante, aquí no se perdonaba ni un momento, unos más que otros.....











Fuimos bordeando la zona NE hasta llegar a al primer pueblo Blenheim y así bajar hasta Christchurch y de ahí al monte Cook. No pudimos ver el cruce para trazar el camino correcto. En vez de llegar al pueblo antes dicho, llegamos a Kaikorua, y todo el viaje que nos queaba por delante iba a cambiar en un solo minuto y apartir de ahí todo lo que voy a contar será pura improvisación.




A pocos kms del cruce que nos pasamos comenzamos a ver focas, miles de focas a pocos kms de nosotros que de verdad parecían estar colocadas a propósito. Paramos entre los gritos el personal y ahí echamos una media hora, relajados y a la vez abrumados por el paisaje que teníamos a nuestras espaldas y delante de nosotros.









































Pasado este momento, para unos el primero y para otros también, el dia comenzó a despejarse y dejarse ver. Toda la niebla y lluvia del principio se esfumó y empezó a verse millones de animales, vegetación autóctona, rios y agua, mucha agua!!.
Continuara.....

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